Se suicidó un falso médico que estaba con prisión domiciliaria en Ezeiza

Juan García Olivares, un hombre que se hacía pasar por médico y esperaba un juicio oral por su accionar, se suicidó en su casa de Ezeiza.

Juan García Olivares, un hombre de 58 años que se hacía pasar por médico, apareció ahorcado en su casa de Ezeiza donde cumplía prisión domiciliaria a la espera de un juicio oral en el que estaba acusado por "homicidio con dolo eventual" por un caso ocurrido el 1° de diciembre de 2020.

El hecho en cuestión ocurrió cuando Víctor Alejandro Calvo, un hombre de 50 años que residía junto a su esposa en un departamento del barrio porteño de Belgrano, comenzó a sufrir fuertes dolores en el pecho y llamó a un servicio de emergencias. En la ambulancia venía García Olivares quien actuó como médico en aquel momento.

Las cámaras del edificio muestran como el falso médico salió del departamento luego de completar una revisión superficial del paciente. En ese momento, García Olivares le comunicó al vecino de Belgrano y a su esposa que no se trataba de un caso urgente, y que contaban con tiempo para acudir a un centro de salud para que le realizaran estudios más detallados.

El impostor se negó a trasladar al paciente porque tenía Covid y se retiró del departamento, no sin antes cobrarle la consulta a la esposa del damnificado, la abogada Laura Fechino.

Desgraciadamente, Calvo estaba teniendo síntomas de un infarto y falleció unos minutos después de la salida del falso médico de su casa mientras intentaba adordar un taxi junto a su mujer rumbo a una clínica cercana. Como consecuencia de este hecho, se inició una investigación judicial por el accionar de García Olivares.

Finalmente, el hombre que se hacía pasar por médico fue procesado por homicidio simple con dolo eventual y usurpación de título. Al mismo tiempo, avanzaban causas similares contra el acusado, ya que familiares de otras víctimas reconocieron su rostro cuando la esposa de Víctor Calvo realizó una denuncia contra García Olivares en diversos medios de comunicación. Se estima que fueron doce las personas afectadas por el falso médico de Ezeiza.